jueves, 21 de marzo de 2013

Soy muy impaciente


Historia:

En la consulta, en los espacios de psicología de los colegios, o en los consultorios médicos la pregunta persistente es sobre educar hijos.

Algunos comportamientos de los ninos son tan sorprendes que los padres terminan agotando sus herramientas, aumentando su frustración y sensación de impotencia por lo que terminan acudiendo a los especialistas que creen les puede resolver su problema.

Significado de la historia:

Algunos padres confunden su rol protector  con su hijo con la responsabilidad legal que tiene como padre de ese nino.

Un nino pequeño requiere un padre con la claridad necesaria para evitar que el hijo se lastime, brindar el cuidado necesario para que ese nino se desarrolle adecuadamente.

Sin embargo proteger no es que el adulto sea responsable de hacer que el nino haga.

Un adulto no puede evitar que el nino se caiga, o viva las consecuencias de sus actos.

El padre – madre puede evitarle al nino un dolor dándole la información necesaria para enfrentar la realidad.

Sin embargo confundir su rol protector como deber suyo puede llevar al nino a usar la tensión que sienten sus cuidadores en su contra y manipular la situación.

Dejado de comer o pegándose cuando esta enojado de tal modo el nino pierde el sentido de auto cuidado por el cuidado excesivo que ejersen sus padres al punto de tensionarse si no logran cuidar al nino.

En educación es muy importante la voluntad y compromiso que tenga el individuo en su propio proceso y es un factor predictor de buenos resultados.

Si el que sufre más con la inapetencia o dano que se hace el nino cuando se enoja es más el cuidador que el nino la ganancia que tiene tal conducta para el nino es mayor que el dolor o el hambre que soporta como individuo para lograrlo.

Relación con el desarrollo:

Como educar hijos implica fundamentalmente no confundir la mediación del adulto con el medio para el fin.

El adulto presta las habilidades que el nino aun no ha desarrollado pero no es la herramienta ni el fin del desarrollo del nino.

El cuidador debe correrse ante cada conquista del nino y aumentar el reto conforme el nino avanza en su desarrollo.


Manejo efectivo:

Es muy probable que al ser una persona acostumbrada a hacerlo todo de manera independiente y en la inmadurez motora, cognitiva y afectiva de su hijo termine haciéndole más de lo que necesita y corresponde.

1.     Actualice permanentemente la imagen que ha construido de su hijo.
2.    Dese cuenta de sus avances y cambios
3.    Aumente las responsabilidades y exigencias periódicamente

Mónica Ceballos Recio                                                                                                 
Psicóloga/ psicoterapeuta                                                                                         Bogotá/Colombia                                                                                                                                        3206763237/ 4623537
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